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DIÁLOGOS DEL TÍO BENITO: ALHARILLA 2015

- ¡Buenos días, señoras y señores!

- ¡Buenos días, Tío Benito! Lo estaba echando de menos, porque pasaban los días y no aparecía por aquí.

- Es que “m’estao” reponiendo “d’esta” romería y de “to” lo “vivío” con la Coronación de la Santísima Virgen “d’Alarilla”.

- Tiene razón, porque no hemos tenido oportunidad de comentar nada de este acontecimiento transcendental para nuestra cofradía y para el pueblo de Porcuna.

- ¡”Qu’orgulloso” me siento de la gente de mi pueblo! Demostramos ser capaces “d’estar” a la altura de las circunstancias.

- Efectivamente, Tío Benito, todo el mundo habló maravillas del evento.

- Los que “semos” devotos de la Virgen, porque le tenemos “muncha” fe; pero los que no creen en “na”, fueron “mu” respetuosos con “tos” los actos “pogramaos”. Con la edad que tengo, yo ya no viviré una cosa igual. ¡Cómo “m’acuerdo” de los raticos tan buenos que pasamos acompañando a Nuestra Patrona por los pueblos de la comarca!

- ¡No me diga que también estuvo presente en los traslados!

- ¡Ni uno me perdí! ¡Qué bonito hubiera “estao”: la Virgen por esos caminos de Dios y yo tranquilico en mi casa! Además, lo digo “mu” alto y “ mu” claro: ha “sío” lo mejor que “m’ha” “pasao” en mi vida. ¡Ole, ole y ole por los “organizaores”, con nuestra amiga Librada Quero al frente, los “colaboraores” y los acompañantes! Cuando pasó “to”, dije a D. Jesús y a la Presidenta: “En Porcuna podíamos dedicarnos a organizar coronaciones después del resultao de la nuestra”.

- Compruebo que, a pesar del tiempo transcurrido, mantiene frescos los recuerdos.

- ¡Cómo “me se” van a olvidar “Gitana”, “Gorda” y “Cordobesa”!

- ¿Quiénes son estos personajes?

- Las mulas que tiraron del carro que llevó a la Santísima Virgen “d’Alarilla” y a su Divino Hijo. Y, por si no lo sabes, los muleros fueron Jaime Juárez, Ibán el de “La Paloma” y Manuel el hijo de Manolín “El Hortelano”

- Me contaron la perfecta sincronización entre ellos y los anderos a la entrada y salida de los pueblos que visitaron.

- ¡Ni ensayando sale mejor! Nuestro amigo José Daniel Heredia, el andero mayor, tuvo “muncha” culpa de “qu’esto” saliera así de bien. Le gusta “muncho” el cachondeo; pero, cuando hay que ponerse serio, no le gana “naide”. Además, el comportamiento de los acompañantes fue ejemplar. Podría contarte montones “d’anécdotas”, chascarrillos y emociones, pero no me quiero poner “mu” “pesao”. Si quieres enterarte de “to”, léelo en el “Internel”, en lo de Manolín Jalón poniendo “Perlas del Camino”.

- Ahora que lo dice, creo que “su” amigo Casto tuvo que ver algo en esto.

- Aunque me cae regular y no “m’hace” “muncha” gracia, lo leí. ¡La de cosas que escribió de los lugares por donde pasábamos y los recibimientos y “despedías” en Arjonilla, Escañuela, Arjona, Lopera y Porcuna!

- No sé si será verdad, pero me contaron que, como les pusieron suculentos desayunos en los distintos pueblos, hizo buena mella en todos.

- ¡Ya estamos! ¡Cualquiera come más que yo y no reluce tanto! Aparte de que no te podías cargar “muncho”, porque después tenías por delante una buena caminata. Lo que sí tengo que decirte es lo “fenomenal” que nos trataron en “tos” “laos”. Eso comentaba a mi mujer: “Paece qu’en estos pueblos quieren a la Virgen más que nosotros”. “Benito, la podrán querer igual; pero más, no” – me replicaba siempre.

- En resumidas cuentas, los esfuerzos y sacrificios de los porcuneros valieron la pena.

- La gente aportó lo que pudo, sin dar una queja; al contrario, “to” el mundo acabó “mu” satisfecho. Aparte del Día de la Coronación y de la “proseción” por las calles de Porcuna, ¿sabes con qué imagen me quedo?

- ¡Ni idea, Tío Benito!

- Con la Virgen “d’Alarilla” y su Divino Hijo en el carro de “Migasgordas”, “tirao” por “Gitana”, “Gorda” y “Cordobesa” por los caminos de La Campiña “rodeá” de sus fieles acompañantes. Cuando volvió a su casa, le confesé: “¡Gracias, Madre mía, por haberme permitío vivir tu Coronación!”. Además, y con esto ya termino, pudimos verlo “to” por Canal 45 y en los miles de retratos que quedaron “p’al” recuerdo.

 

X ROMERÍA ESCOLAR

- Después de tanto ajetreo con la Virgen de Alharilla, supongo que se tomaría un año sabático y esta romería la pasaría en casa con su señora.

- ¡Qu’equivocao” estás! Te lo he dicho “munchas” veces: mientras la Virgen me tenga “medioqué” no pienso perderme una. Además, ésta ha “sío” un tanto especial porque era la primera que celebrábamos con la Virgen “d’Alarilla” “Coroná”. ¿Sabes lo que no me gustó al principio?

- Ni idea, Tío Benito.

- Ver las caras de Jaime y María “Alarilla” acordándose de “to” lo “vivío” durante su mayordomía. ¡Quién les iba a decir que serían “potragonistas” de tantísimas emociones!

- Entonces, podría hablarme algo de los Hermanos Mayores de este año

- ¡Faltaría más! “Ca” uno habrá “disfrutao” lo suyo; pero, con lo que Luis Ángel y Maribel habían “sembrao”, estaba “asegurá” la cosecha. ¡Qué satisfechos pueden estar de la respuesta de familiares y amigos! Aparte de ser de la directiva de la cofradía, Luis Ángel, como es tan buena gente y tan servicial, “s’había” “volcao” con “tos”; luego, era “obligao” devolverle la “monea”. Por otro “lao”, como hay tantos “Perreras” y “Pacurros”, el éxito estaba “asegurao”. Como mi “cuñao” es tan camastrón, me preguntó un día: “Benito, ¿podrías decirme cuántos ‘Perreras’ hay en Porcuna, cien arriba o abajo?”.

- Le doy toda la razón.

- Por si fuera poco, acuérdate de Emiliano Vallejos, que en paz descanse, “agüelo” de Maribel, que inculcó a los suyos el amor y devoción a la Santísima Virgen “d’Alarilla”. Ésta ha “sío” una de las familias que más ha “aportao” a nuestra romería: mayordomos, caballistas, carrozas, casetas, romeros “da” pie y, por si fuera poco, pregoneros, como ha “sío” este año Francisco Javier, el hijo de Rincón el del Ayuntamiento. “Me s’olvidaba” decirte “qu’el” “agüelo” Emiliano y el amigo José María “El Churro” fueron los carpinteros “qu’hicieron” las puertas de la ermita. ¡Ésos si que conocían bien su oficio! Y otra prueba más, de lo que “t’estoy” diciendo de Emiliano, la tienes en que también está en el famoso retrato del recordado César con la Virgen por El Llano “d’Alarilla”.

- ¿Cómo resultó la X Romería Escolar, Tío Benito?

- Paece” que fue ayer, pero ya han “pasao” diez años. ¡Como “m’acuerdo” de mi amigo “Villica” y de su hija María! ¡Con qué orgullo presidieron esa primera muestra de cariño infantil a Nuestra Patrona por las calles de Porcuna! Aparte de los maestros y las maestras, hay que resaltar la labor de madres y “agüelas” que se lo tomaron tan a pecho que el “resultao” está a la vista.

- Creo que debemos felicitarnos todos por haber iniciado y haber sabido mantener este acto, ya arraigado en nuestra romería, durante un decenio. Como suele hacer, me lo imagino en el Colegio “Santa Teresa” escuchando el Pregón Infantil correspondiente a este año.

- ¡A las cinco y media, “clavao” como un reloj, estaba en el salón “d’actos” “sentao” en medio de mi prima María “La Pimienta” y Encarnita Gay!

- Con esa escolta estaría más centrado, que en otras ocasiones, y no perdería detalle.

- Más “d’una” vez, como estábamos en la última fila y había tantísima gente, me tuve que levantar “pa” ver bien. Aquí tenías a “La Pimienta”: “¡Primo, estáte quieto, que paece que tienes azogue!”.

- Dirá lo que quiera, pero siempre ha sido culillo de mal asiento. Para otra ocasión le recomiendo que hable con la superiora para que lo coloquen con los más chiquitines.

- Te guaseas de mí; pero, “pa” colmo, tenía delante a Juana “La Gallica”, “qu’iba” recién “peiná”, y “pa” ver bien tenía “qu’hacerlo” por un “lao” o por otro. ¡Ay, qué fatiguillas pasé!

- Con lo curiosón que es, me imagino lo mal que escaparía.

- Aunque con el pescuezo “daleao”, no me perdí detalle. ¡Qué garrampones los mayordomos y su hijo Ángel con sus sombreros “d’ala” ancha! Mi prima, que también casca lo suyo, “m’apuntó”: “Primo, se los han comprao iguales porque asi les salen más baratos. ¿T’has dao cuenta qu’en en el escenario está la Generala?”. Yo, “qu’estuve” tres años en la mili, me quedé “pillao”. Allí estaban: el Alcalde, Sandra, Luis Ángel, Maribel, Jaime y María “Alarilla”. Como estoy “mu” mal de la vista, no me percaté “qu’había” otra mujer “sentá”. “Primo, ésa es la madre Carmen, la que manda en toas las monjas”. “¡Pues si s’hubiera puesto uniforme y fajín, como el General Curro Alcalá, l’habría conocío!” – le contesté.

- ¿Qué ambiente hubo en el colegio de las monjas?

- El salón “s’ha” “quedao” chico “pa” tanta gente. Así que, en el patio, “s’acomodó” el resto del personal, que no fue poco.

- Como lo recuerdo de otras romerías, Paqui Cruz, la directora, sería la anfitriona del acto.

- Allí la tenías hecha un “brazomar”, con su mantón azul y su flor del mismo color, en el escenario. “¡Qué guapa está mi Paqui!”- decía Antonio, su “marío”, con la babica caída. Como ya tiene “munchas” tablas, ¡qué bien presentó sin dejar suelto ni un cabo! Otra “qu’está” en forma es la seño Mari Carmen Quero. Mi prima, como es tan zumbona, apostilló: “Primo, la seño está repartiendo más melladas que Miguel Moreno el Día d’Andalucía”.

- No hace más que referirme a su parienta, pero a Encarnita Gay ni me la ha nombrado.

- ¡Ésa es otra que también habla “to” lo que puede y más! Llegó un momento en que yo ya no sabía si Herodes era el mayordomo; si San José, la Virgen y el Niño iban por El Llano de “l’Arilla” o si los Reyes Magos estaban en La Carrera con los camellos. ¡La de cosas que me pudo contar! Aparte de las bromas, hay que reconocer lo que vale: “tos” los años nos sorprende con su belén. “Dende” que lo monta en La Casa de la Piedra ha “mejorao” tanto que lleva dos años “seguíos” ganando el concurso de Canal 45, aparte de las veces “qu’ha” “sío” la campeona en Porcuna. ¡Ea, hasta me confesó que, a lo mejor, el año que viene mete también la romería, aunque los caballistas tengan que ir “vestíos” “d’hebreos”! Mientras “m’hablaba” reparé en mi amigo Germán “El Obispo”, “qu’estaba” más ancho que largo porque su nieta María era mayordoma de su curso. Como sé cómo las gasta, pensé: “¡Ya tengo la convidá asegurá!”. No te lo creerás, pero María ha visto “cumplía” una de sus mayores ilusiones; porque, “ca” año que no salía “elegía”, se pegaba una “panzá” llorar. ¡Lo qué disfrutó con su banda y su báculo!

- ¿Cómo se desenvolvieron Luis Ángel y Maribel en el primer acto de la romería?

- Maribel, perfectamente: “pacía” “qu’había” “sío” mayordoma “toa” su vida. Sin embargo, su “marío” lo hizo regular.

- No me creo lo que dice. Luis Ángel, con la experiencia que tiene en nuestra fiesta, estaría “sembrao”.

- Eso mismo era lo que yo pensaba porque, “pa” ser un hombre “qu’es” capaz de barajar un coche con seis caballos, ¡qué torpe “pa” ponerse la banda de la Romería Escolar! ¡Hasta su amigo Jaime tuvo “qu’echarle” una mano!

- ¿Quién pregonó este año?

- ¡Ni más, ni menos que Lucía Casado de la Rosa?

- Por el nombre y apellidos no la conozco.

- Pues la nieta de Paco el de Costanza, el mejor saetero “qu’ha” “tenío” Porcuna. Como de casta le viene al galgo, la pregonera cantó y nos hizo cantar a “tos” los presentes. Te lo he dicho “munchas” veces: te quedas “asombrao” de las cosas tan bonitas que son capaces de decir a la Virgen y a su romería con lo chiquitines que son. Lucía “s’hartó” de piropear a Nuestra Patrona y a “to” lo “qu’hay” a su alrededor. ¡Qué aplauso se llevó cuando acabó, porque lo hizo “fenomenal”!

- Después del pregón, comenzaría el desfile para ir al encuentro del Colegio “Juan Carlos I” y la Guardería Infantil.

- ¡Qué va! Estuvimos viendo y escuchando al Coro Romero “Sentir Alharillero”. ¡Vaya nombre “más” “apropiao” que buscaron estos jovencísimos “cantaores”! Como yo ya no conozco a “nadie”, mi parienta “m’aclaró”: “Primo, son tres varones y diez hembras, el director es Diego, el hijo de Mari ‘La Costeña”, y llevan ya cuatro años cantando a la Virgen de ‘l’Arilla’”. ¡Qué bien estuvieron! Eso pensé: “¡Qué graciosos! ¡Lo mismo que yo, que no sé ni abrir la boca con el montón d’años que tengo!”.

- ¿Volvieron a soportar las altas temperaturas de otras ediciones?

- Hubo suerte, sobre “to” “pa” los romeros del Colegio “Juan Carlos I”, porque se presentó una tarde fresquita y no pasaron el calorín “d’otros” años por el Camino Alto.

- Su amigo Victoriano Callado tiene muchas quejas porque, según me comentó, iba usted con los representantes del Colegio “Santa Teresa” y no saludó a nadie.

- ¡Vamos a ver, que “to” tiene su explicación! Resulta que, “pa” subir a La Farola, se formó la “cometida” en el Llanete de las Monjas.

- Será la comitiva, Tío Benito.

- Bueno, lo que tú digas. El caso es que llegó Paqui Cruz: “Tío Benito, venga que la Generala quiere conocerlo”. Yo, que, como “t’he” dicho antes, hice tres años de mili, y esas cosas no “s’olvidan”, me cuadré y “l’hice” una reverencia “acachando” la cabeza. “Relájese, Tío Benito, porque, aunque tengo esa graduación, mando menos que un cabo furriel de antes” – me tranquilizó la madre Carmen. A pesar de la confianza que me dio, como no lo puedo remediar, estuve “toa” la tarde “envarao”. Hasta Benito, el de San Benito, me lo notó: “Tocayo, paece qu’en vez de ‘Varón Dandy’, t’has echao laca después del afeitao, porque no te se mueve un músculo de la cara”.

- Me habría gustado verlo tan serio como dice. ¿Hubo algún acto especial para celebrar el décimo aniversario?

- Que yo sepa, no. Está claro que, tanto la cofradía del “Juan Carlos I” como la de la Guardería, se presentaron con el poderío de siempre con sus banderas y sus bandas de tambores al frente. ¡Bien que lucieron la imagen de la Virgen de “l’Arilla”, “qu’había” hecho el maestro Manolo Ramírez “pa” las Cruces de Mayo! Ahora, los más graciosos de “tos”, los chiquitines: ¡bajaron la calle Salas sin poner los pies en el suelo! ¡Qué velocidad! Como a la vez que corrían, tocaban los tambores y las trompetas, comentó Benito: “¡Éstos paecen La Legión! ¡Las maestras, en vez de traje de gitana, se tenían que poner ropa de deporte, porque terminan entregás!”.

- ¿Acudió mucha gente a La Carrera y a La Plazoleta?

- Como esto es un cheque al portador, hubo más ambiente “qu’el” día de la romería grande. Ahora, lo mismo “qu’acudió”, desapareció.

- ¿A qué se debieron esas prisas?

- ¡Al “fútbol”! ¿No “t’acuerdas” “qu’esa” misma tarde jugaba el Real Madrid con la Juventus? Se quedó La Carrera que “pacía” “qu’habían” “pegao” cuatro tiros. Eso sí, antes se lucieron los romeros rezando y cantando a Nuestra Patrona “dirigíos” por D. Jesús y Loli “La Maera” . A los maestros y a las maestras hay que felicitarlos por lo bien que leen los “menuillos”. ¡Qué berrinche pilló mi mujer en La Carrera cuando regresaban los participantes a sus colegios!

- Me imagino que, como siempre, el Tío Benito haría alguna de las suyas, se enteraría su señora y se enfadaría.

- ¡No señor! “To” fue porque se presentó Mari Carmen Gómez, la de Canal 45, y la entrevistó. Ella, “qu’estaba” deseandico, porque bien “trempano” “s’había” ido “ase” Marta “pa” que la peinara, cuando pilló el micrófono, “s’explayó”: “¡Mari Carmen, qué guapa estás! ¡Esto es lo más grande del mundo! ¡No tengo palabras! ¡Qu’emocioná estoy! ¡Qué nerviosa m’he puesto! ¡Sí, ese cabezorrete que va por ahí, es mi nieto, el más guapo! ¡Espérate que va a hablar él también!”. Aquí fue donde empezaron los títeres porque el niño, “qu’es” “mu” bueno pero un poquito cabezón, “acachó” la cabeza y no hubo “güevos” de “qu’abriera” la boca. La “agüela” lo intentó un montón de veces, pero el niño ni mus:” ¡Ay, Virgen mía d’Alarilla, que no me deja ver lo de Puente Viejo, que paece un sacamuelas hablando, y cucha usted hoy! ¡Es más parao que su agüelo Benito!”.

- Mire por donde, pilló un raspazo.

- Tú sabes lo que pasa, “tos queremos que los nuestros sean los mejores, y éste, en lo vergonzoso, es clavaico a mí.

- No lo creo, con la fama que tiene en el pueblo de “echao” “p’alante”.

- ¡Qué va! Lo que pasa, es que “me se” presenta “ca” cosa, que no me queda más remedio que sacar la yunta a lo llano. “Pa” que veas que no “t’engaño”, ahora voy a contarte lo que me pasó cuando iba “pa” la Ofrenda de Flores.

 

OFRENDA DE FLORES

- Cualquier cosa, porque de usted me lo espero todo.

- Como hacía “mu” buena tarde y todavía era “trempano”, “me s’ocurrió” irme por La Carrera, y, mire usted por donde, en la puerta del “Bar Parada” estaban mis amigos Lorenzo “Zancanegrilla”, Manuel “El Picaor” y Antonio “Cosas Feas”.

- A los dos primeros los he conocido, pero ¿quién es Antonio?

- Te lo dicho otras veces: Antonio es el hijo de Frasquito “Cojones”; pero, “pa” que no resulte tan basto, lo llamamos así. ¡Ay, que me tenía “qu’haber” ido por El Llanete Cerrajero!

- Con lo que presume de amigos, lo que se queja de ellos.

- Vamos a ver, me da “muncha” alegría cuando los veo y los saludo; pero, como no queda ahí la cosa, por eso me lamento.

- Tampoco lo obligarían, ni le darían una paliza.

- Ellos, no; pero mi mujer sí estuvo a punto de emplearse en mí cuando, bien tardecico con las flores ya “pasás”, me presenté en mi casa cantando por alegrías.

- Era lo suyo, porque la ocasión lo requería. Además, no lo tengo catalogado como un ser triste. Explíqueme de dónde tanto júbilo.

- ¡Pues de los “cacharricos” que nos sirvió “El Nicol”! Yo, que ya no bebo “na”, me puse como una moto. Y “toa” la culpa la tuvo el “disjokey”, que se “l’ha” “subío” la fama a la cabeza y, como no es “mu” alto, “l’ha” “llegao” “mu” pronto.

- ¿Quién es el famoso personaje?

- ¡Lorenzo, quién va a ser! El “malditalma” ha “cogío” vuelos con lo del cante y ahora lo llaman “pa” “to”. Allí lo tenías dando “cojetás” porque, en lo último que presentó en “El Julio Romero”, pegó un “esfarotón” en el escenario y se lesionó. Como tiene tanta letra “menúa”, empezó: “En primer lugar, tengo el honor de presentar a Manuel ‘Picaor de Porcuna’; a continuación, Antonio ‘El Cosas’; en tercer lugar, El Tío Benito ‘El Ruiseñor del Paseo de Jesús’; y acabaremos con el baile de la silla de Lorenzo ‘Zancanegrilla’”.

- ¡Menudo plantel se juntó esa tarde!

- Cállate que, como nos calentamos, propuso el “disjokey”: “Vamos a ver la Ofrenda de Flores y pedimos permiso pa cantar a la Virgen de l’Arilla después de los coros”. Dicho y hecho. Mira por donde, al salir del “Nicol” nos encontramos con Nicolás, el hijo de Dulce y Nicolás, Paco el del Bodegón y un montón de nenes “mu” altos que venían cantando: “¡Campeones, campeones! ¡Oé, oé, oé! ¡Campeones, campeones! ¡Oé, oé, oé!”. Nos enteramos que “s’habían” “proclamao” campeones provinciales de baloncesto. Como somos tan “cumplíos”, los felicitamos dando un abrazo a “ca” uno. ¡Te “pues” imaginar cómo escapamos: ellos tan altos, y nosotros tan bajitos! Cuando nos despedimos, dijo Lorenzo con “muncha” gracia: “¡Lo que me faltaba pa la cojera: ir como Miracielos!”.

- Con tanta celebración y felicitación, no verían nada de la ofrenda.

- ¡Sí señor, que lo vimos “to”! ¡”Menúo” ambiente había en la Plazoleta completamente “abarrotá” de gente llevando flores a la Virgen! Entre la Romería Escolar y esto, está “asegurá” la devoción a Nuestra Patrona. Allí tenías a Luis Ángel y a Maribel, que no daban abasto, arrimando ramos a Francisquito y a “Jose” Ángel Garrote “pa” formar el tapiz “alredeor” de la Virgen.

- Supongo que, como el viernes hubo colegio, habría menos niños que en otras ocasiones.

- ¡Que te crees tú eso! Había dos colas: una llegaba hasta El Arco; y la otra, hasta Pepe Cruz. Además, es “to” un espectáculo ver la ilusión en la cara de los “menuillos” mientras cantan los coros romeros. ¡Qué bien lucieron, con la tarde noche tan buena que hizo, Esther Aguilera, la “presentaora” un año más, El Coro de la Hermandad, “La Alegría del Llano” y “Sentir “Alharillero”!

- Tío Benito, este año se han cumplido diez años de la Romería Escolar, pero la Ofrenda de Flores lleva algunos más.

- Sí señor: empezó el año 1995, siendo Presidente de la Cofradía D. Juanín Cobo, Hermanos Mayores Miguel Moreno y Gloria Madueño, debutó el Coro Romero “La Alegría del Llano”, Rocío Pulido piropeó a Nuestra Patrona, “El Gory” empezó a poner lo de los altavoces y el “presentaor” fue Casto.

- Parece que no; pero, gracias a la aportación de unos y otros, se va escribiendo la historia reciente de nuestra cofradía.

- Hablando de historia, no podemos olvidar a José Herrador Delgado, que fue presidente durante “munchísimos” años y supo mantener, contra viento y marea, la devoción a la Santísima Virgen “d’Alarilla”. Seguro que, en la romería del cielo, será el “encargao” de llevar la bandera de la cofradía de Porcuna.

- Cuénteme cómo acabó la noche con sus amigos.

- ¡Regular!

- No le pega emplear esa palabra, cuando siempre se lo pasa muy bien.

- Como te dije, antes “d’encontrarnos” con los del baloncesto, teníamos “pensao” cantar a la Virgen cuando acabaran los coros. Así que, se lo dijimos a Esther Aguilera que, al oír la proposición y reparar en el elenco de cantaores, mirándonos “d’arriba” abajo, respondió: “Como vamos mu mal de tiempo, no les aseguro na: esperen al final”. Lorenzo, que “d’esto” sabe más, dijo: “Mientras nos toca, vamos a tomarnos una copica en ‘Los Iberos’ y hacemos voces a la vez”. ¡No hubo más “qu’hablar”! Lo malo fue “qu’hicimos” tantas voces que, cuando nos dimos cuenta, “s’había” “acabao” “to”. ¡Ea, con decirte que “El Gory” y su “cuñao” Manuel habían “apagao” las luces y estaban recogiendo los altavoces, te lo digo “to”.

- Entonces, no pudieron cumplir la promesa de piropear a la Virgen.

- ¡No das una! Cuando Juan Francisco vio llegar a los cuatro sonsolicos, como nos conoce, avisó a su hermano político: “Manuel, no tengas tanta prisa, porque paece que se va a prolongar la velá”. “El Picaor”, que llevaba la lengua “mu” resuelta, “l’explicó” lo que queríamos. “¡Ya mismo se suben al escenario y s’hartan de cantar! Esperen un momento que, enseguía los colocó” - nos contestó. Cuando se puso a nuestro “lao”, como es tan grande, “El Cosas” saltó: “¡Juanfran, o te pones de rodillas o no t’hablamos porque de voces estamos mu bien, pero de pescuezo estamos hechos polvo!”.

- Con la experiencia que tiene, les daría sabios consejos para que se lucieran.

- ¡Enfíjate” si tuvo vista que colocó a Manuel de cantaor, al “Cosas” y a mí haciendo palmas y “pa” bailar Lorenzo. “¡Atentos, que voy a enchufar los micrófonos!” – avisó el técnico. Aquí nos tienes a “ca” uno en su papel: Manuel apretando con los ojos “cerraos”, “El Cosas” y yo con las sordas, y Lorenzo dando “cojetás”. Miré de reojo y me “pacío” ver a la Virgen de “l’Arilla” y a su Divino Hijo partiéndose de risa viendo el fin de fiesta que se les había “presentao”. ¡Cállate, que se dieron cuenta los “qu’estaban” “sentaos” en “Los Iberos” y en “El Brasilia” y “s’acercaron” a vernos! Como empezaron a aplaudirnos y a gritarnos: “¡Toreros! ¡Toreros! ¡Toreros!” -, nos lo creímos y acabamos, entre unos y otros, tocando “tos” los palos. Ahora, el que mejor cantó fue Lorenzo que se cuajó unas alegrías por Chano Lobato “pa” quitarse el sombrero. A ver si “m’acuerdo” bien de la letra:

Tirititrán, tran, tran

Tirititrán, tran, tran

Tirititrán, tran, tran

Tirititrán, tran tran.

Aquí en La Plazoleta

estamos cantando,

estamos cantando

y flores a la Virgen

estamos llevando,

y flores a la Virgen

estamos llevando.


Cantamos a la Virgen de Alharilla

que tiene una cara que maravilla,

que maravilla. niña,

que maravilla,

cantamos a la Virgen de Alharilla.

- ¡Me asombra usted con esta nueva faceta! Nunca imaginaba que acabaría cantando flamenco porque, aunque “Los Pimientos” tienen fama en Porcuna de buenos cantaores, usted salió de piquillo. ¡Vamos, que se parecerá a un primo lejano! Con el éxito cosechado, se prolongaría la velada.

- ¡Cuando me di cuenta de la hora “qu’era”, sin decir “na”, los dejé con la copla en la boca y me fui corriendo “pa” mi casa!

- Su señora lo recibiría con los brazos abiertos.

- Como lo llevaba “metío” en la sesera, cuando mi parienta abrió la puerta, la sorprendí con un “Tiritrán, tran, tran”. ¡No me dio tiempo a más! “¡No iba a dar él la nota! ¡Virgen mía d’Alarilla, que me tiene mu hartica! ¡Hoy, por alegrías; mañana, por fandangos! ¡Ay, qu’este hombre s’apunta a to! ¡Anda, que t’habrás lucío bien!”.

- Entiendo perfectamente a su señora.

- ¡Pero si yo no lo hago con intención! Lo que me pasa es que soy “mu” frágil y “tos” me llevan al “güerto”. No te lo creerás; pero, cuando pasó el chaparrón, “m’acosté”, me dormí y soñé con que Manuel, Antonio, Lorenzo y yo nos hacíamos famosos y “La Temporera” nos contrataba “pa” su Besana Flamenca.
 

PREGÓN

- Después de su soberbia actuación, no tendría ganas de ir al Pregón.

- ¡”M’iba” yo a perder al hijo de mi amigo Francisco Rincón pregonando a la Virgen de “l’Arilla”.

- Personalmente no conocía al pregonero, pero me hablaron muy bien de él.

- Yo tampoco; pero, como el Ayuntamiento ha hecho una revista, que se llama “90 dias”, y venía su retrato en la “portá”, lo conocí. Por si no lo sabes, se llama Francisco Javier Rincón Vallejos, hijo del maestro de obras del Ayuntamiento, nieto del recordado Emiliano Vallejos, “casao” con una hija de Antonio “Callao”, primo de Maribel la mayordoma, vive y trabaja en Suiza y, por si fuera poco, tuno y andero de la Virgen.

- Con estos mimbres, haría un buen cesto.

- ¡Cómo lo sabes! Esta gente joven, como está “mu” “prepará”, cuando se ponen a decir cosas bonitas de Nuestra Patrona, no hay quien le gane. ¡Otro año que pasé un apuro “mu” grande!

- ¿Qué problema se le presentó?

- Pues que, con las prisas, “s’olvidaron” las entradas en la casa. Mi mujer, como siempre, “m’echó” la culpa:” ¡Claro, como el señor no sabía qué ponerse, por si saludaba a su amiga Mari Carmen la de Canal 45!”. “¡Anda que tú, que no has querío echarte un coscorrón pa no despeinarte!” – le repliqué. Pasó por allí el mayordomo y, al enterarse, echó mano al bolsillo y nos solucionó la papeleta.

- ¿Hubo mucha gente escuchando a Francisco Javier?

- ¡Chico se quedó “El María Bellido” “pa” tanto personal! ¡Qué bonito estaba el escenario con un retrato “mu” grande de la Virgen de “l’Arilla”, las banderas y el estandarte de la cofradía!

- Debemos sentirnos orgullosos de nuestro teatro municipal; porque, aparte de lo bien que quedó, hay que ver el rendimiento que se le saca a lo largo del año, celebrándose en él eventos de todo tipo.

- El “d’esa” noche salió “fenomenal”. ¡Ay, “qu’estuve” más sujeto que Miguel Moreno en la presidencia!

- ¿Qué le sucedió?

- Qu’escuché” el pregón como si hubiera “estao” “escoltao” por la pareja de la Guardia Civil: a un “lao” mi mujer; y al otro, Antonio, la hija de Benito Jalón, “qu’en” paz descanse. Como es tan zumbona, “m’advirtió”: “Tío Benito, hasta ahora no va escuchar bien un pregón. ¡Qu’está hecho un culillo de mal asiento! Estoy aquí sin ganas, porque van a operar a mi marío. El lunes, si Dios quiere, lo ingresan. Ojalá salga to bien. A la Virgen de l’Arilla l’he pedío que l’eche un ojito y lo ponga pronto bueno”. Por si fuera poco, al “lao” “d’Antonia” estaba Encarna “La Veleta”:”Tío Benito, cuando estoy en Barcelona, lo que m’acuerdo de Porcuna. ¡Qué ganicas tenía de venir! Está hecho un chaval para la edad que tiene. ¡Se nota que su señora es una santa y lo cuida muy bien! Me dice mi amiga Amparito Burgos que no se pierde una durante la romería porque lo ve en todos sitios”. Encima que no había abierto el pico, apostilló mi mujer: “Benito, haz el favor de no molestar”. Como soy tan obediente, no pude decir a Antonia lo “qu’echo” de menos a su padre, porque “m’acordaba” de cuando íbamos a la taberna de Félix “Pimiento”, nos tomábamos una copica y acabábamos cantando por Pepe Marchena y Farina.

- Con esa vigilancia, no perdería detalle del pregón. Cuénteme algo.

- Lo primero, la presidencia con el Alcalde, D. Jesús, Librada, los mayordomos, la mujer del pregonero y Cristina, la pregonera del año “pasao”, que, como sabes era la “encargá” de presentar al “d’esta” romería. ¡Ésos sí “qu’estaban” como piojos en costura! Tenían que ponerles una mesa más larga porque ¡no veas cómo puso Luis Ángel el “vestío” a su mujer y la chaqueta a D. Jesús de la “panzá” de llorar que se pegó escuchando a Francisco Javier! Mi parienta, que también se percató, me comentó bajito: “¡Con lo bonito qu’es y lo qu’habrá costao el vestío a Maribel, cuando pase la romería y se seque, tendrá que llevarlo a la tintorería! ¡Qué lástima la chaqueta del párroco, con lo curioso que venía recién pelao! ¡Anda que, como l’encoja y se le quede más chica!”.

- ¿Tanto lloró el mayordomo?

- ¡Lo que yo te diga! Ves tú, a Maribel, aunque también se “l’escaparon” algunas lagrimillas, aguantó “mu” bien el discurso tan emocionante que nos echó Francisco Javier recordando a muchos familiares y vivencias de nuestra romería a pesar de ser “mu” joven y vivir “mu” lejos de nuestro pueblo. Nombró al recordado Manolo Garrido cuando compusieron una rumba a Nuestra Patrona. Tampoco “s’olvidó” de Ángel, el hijo de los mayordomos, dedicándole unas palabras “mu” bonitas. La “qu’estuvo” también “fenomenal” fue Cristina, la pregonera del año “pasao”.

- No recuerdo quién era Cristina.

- Te lo voy a decir alto y claro: ¡sobrina de Luis Ángel y novia del hijo de José “Capote” el Encalaor, que “m’equivoqué” y te dije Antonio!

- Según me ha dicho, la mujer del pregonero es hija de su amigo Antonio Callado

- ¡Poco orgulloso “qu’estaba” cuando, al acabar, fui a felicitar al pregonero y me lo encontré: “¡Tío Benito, no se lo creerá; pero, escuchando a mi yerno, me s’han puesto los pelos de punta!” – me refirió. “¡Adiós, Marcelino Pan y Vino! ¡Seguro que a tu Manuel l’ha pasao lo mismo!” – le repliqué con la confianza que tengo.

- Por lo visto, sufrió usted más de una equivocación.

- ¡Cállate, que, por lo menos cuatro veces, felicité al hermano en vez de al pregonero! Como se “paecen” tanto, pasó lo que pasó.”¡Tío Benito, que yo soy Emiliano:que se ha vuelto a equivocar!” “m’aclaró” el otro hijo de Rincón. “¡Pues si t’hubieras hecho una cruz en la frente no m’hubiera confundío!” – dije a Francisco Javier cuando le di la enhorabuena por su pregón, sin saber de qué iba la cosa.

- No me ha referido nada del presentador ni del Coro de la Hermandad.

- ¡Poco bien “qu’estuvieron” Manolo Cobo, dando detalles de la Coronación, y los de la Hermandad cantando a la Virgen de “l’Arilla”! Por si fuera poco, nuestro amigo “Romerito”, con su pito y su tamboril, “s’encargó” “d’abrir” y cerrar el acto. Antonia, mi vecina, me lo apuntó: “A este hombre lo tenían qu’empadronar en Porcuna, porque está aquí más qu’en Jaén. Y otra cosa le voy a decir, Tío Benito, Auxiliadora y Esther cantan tan bien porque han salío a su madre Elvira y a su tita Patro la de las Bodas; porque Tomás y Leovigildo, qu’en paz descansen, mu buenos; pero de cantar, poquito”.
 

VIERNES POR LA NOCHE EN ALHARILLA

- Como se ha puesto de moda quedarse en Porcuna el viernes por la noche, supongo que no irían a ver a la Virgen.

- ¡”Qu’equivocao” estás! Cogimos las dos tortillas, nos fuimos al Camino Alto a coger el autobús y “pa” “l’Arilla”. ¡Ay, que no hay que ser tan “cumplíos”!

- Vaya, volvemos a las lamentaciones.

- Resulta que Luis Ángel y Maribel nos convidaron a tomarnos una copica, y estaba feo presentarte con las manos vacías. “Benito, con los güevos que t’ha regalao tu hermana Angelita, voy a hacer un par de tortillas y se las llevamos a los mayordomos” – “m’anunció” mi mujer. Ella las hizo, pero a mí me tocó llevarlas “dende” la calle Yerro hasta “l’Arilla”. ¡Hasta “me se” pusieron más largos los brazos del peso! Además, por poquito no tenemos un conflicto internacional.

- La Guerra de las Tortillas” habría sido el titular.

- Resulta que, cuando llegamos a ver a la Virgen, como pesaban tanto, las dejé en el suelo. Al verla tan bonita con su manto verde y su corona nueva, le dije: “Virgen mía d’Alarilla, gracias por tenernos otro año contigo. Te pido por tos los de Porcuna, por tos tus romeros, por las personas mayores, por los enfermos, por los que lo están pasando mal, por esos probeticos refugiaos, por la paz en el mundo y porque seamos un poquito más buenos con los que nos rodean”. Cuando llegamos, la iglesia estaba casi vacía, pero dijeron a llegar “Perreras” y “Pacurros” y se puso “pa” reventar. Con tanta gente, cuando quisimos irnos, eché mano y las bolsas con las tortillas habían “desaparecío”. ¡Tres vuelcos me dio el corazón! “Benito, el que se las haya llevado, no estará mu lejos” – me tranquilizó mi mujer. Salí corriendo y, en la lonja, veo a un hombre y a una mujer “mu” rubios con una bolsa “ca” uno. Me fui “pa” ellos y les dije “qu’eran” mías.

- El problema se solucionaría rápidamente.

- ¡Qué va! Como eran extranjeros y no entendían lo que les decía, no soltaban la carga. Lo único que se les entendía “mu” mal: “¡Suvenig d’Agagilla! ¡Suvenig d’Agagilla!”. “¡Ni susvenis, ni sus quedáis: las tortillas son mías y me las tenéis que dar!”. Como la cosa iba a más, se presentó Salvador Gallo muertecico de risa porque él había “sío” el artífice de “to” “pa” gastarme una broma. “Tío Benito, éstos son mis amigos Hein de Jonge y Lenny Schamale, qu’han venío d’Holanda a conocer nuestra romería. Ande, salúdelos y recoja sus tortillas”. Cuando hicimos las paces, resultaron ser “mu” simpáticos y “mu” amables. “El Hein” me soltó: “Tío Benito,seg fiel hegueguego de los Tegcios de Flandes. ¡Is bravo, bravo!”. No “m’enteré” “mu” bien de lo que me quiso decir; pero, como ya tenía una bolsa en “ca” mano, me daba igual lo que dijera el holandés.

- Por lo que me cuenta, se confirma que nuestra romería se hace cada vez más internacional. También compruebo que rápidamente firmaron el armisticio.

- ¡Poco bien que nos lo pasamos después con “El Hein “ y “La Lenny”! Mi mujer congenió “mu” bien con la holandesa y ¡qué “panzás” de reír se pegó la paisana de “Cruiff” y “Neskes” con “na” que le decía! Cuando ya nos marchábamos, nos avisaron “qu’iban” a bendecir el banderín de la Coronación que Luis Ángel y Maribel habían “regalao” a la Virgen. Como pudimos, nos pusimos de los primeros. D. Jesús pronunció unas palabras y, después, bendijo el guión. Como nuestro párroco también es un poquito guasón, con el mismo “guisopo” nos remojó bien “d’agua” bendita. A “La Lenny” y a mi señora, que pillaron un buen raspazo, se les puso el flequillo que “pacían” pollicos “dapeseta”. “La Lenny” no entendía “na”, pero se partía de risa. Sin embargo, ¡que poquita gracia hizo a su amiga! “¡Y pa esto habré estao toa la mañana ase la Marta! ¡Con el dineral que m’ha costao! ¡Y propina y to que di al Alberto! ¡Claro, como él no tiene este gasto!” – se quejaba mientras se secaba con el pañuelo.

- Y usted, ¿no pilló agua bendita?

- ¡Ya lo creo! Pero aguanté sin secarme, porque pensé: “Aunque m’ahogue, no suelto las bolsas. ¡Pa que me pase lo de antes!”.

- Después del remojón, adónde encaminaron sus pasos.

- Al salón de los mayordomos. En cuanto nos vieron Luis Ángel y Maribel, les faltó tiempo. Mi mujer “s’adelantó”: “¡Munchas gracias! Aquí os traemos dos tortillas “qu’estan” hechas con güevos recién puestos”. “¡Justo lo que faltaba! – respondió la mayordoma. ¡Qué tranquilo me quedé cuando solté la carga!

- ¿Qué fue de sus amigos holandeses?

- ¡”Qu’estuvieron” con nosostros “toa” la noche! Entre los dos se comieron casi una tortilla. El caso es que les gustaba “to”: el jamón, el queso, el lomo “embuchao”, los flamenquines, las gambas, la cerveza, el vino, los cubatas, los pastelitos… “¡Tío Benito, magaguillosa Agaguilla! ¡To veguigú!” decía mientras pelaba otra gamba. Eso pensé al ver el saque que se gastaban: “A éstos los tenían qu’haber pesao dos veces: una, cuando llegaron a Porcuna; la otra,cuando se fueran. ¡Seguro que tendrán que pagar demasía en el avión de vuelta!”. ¡Qué rico “l’estaba” “to”!

- Usted no se quedaría atrás.

- Hice lo que pude, aunque lo que más me llenó fue el espectáculo que se montó con artistas de postín.

- ¿Quiénes les alegraron la noche?

- Empezó nuestro amigo Manuel Santiago Quero “ElCampano”. “Pacìa” que lo de “La Copla” de Canal Sur “s’había” “trasladao” a “l’Arilla”. ¡Qué bien cantó con esa voz que tiene! “Además, ¡qué guapo es!”- decía mi mujer a “La Lenny” que, en esos momentos estaba dando buena cuenta de un plato de papas rellenas que “l’arrimaron”. Después, Rafalillo Saco “s’arrancó” por fandangos. ¡Ole, ole y ole! ¡Yo no sabía “qu’ese” paisano nuestro cantaba “d’esa” manera!

- Me dijeron que usted acabó haciendo sus pinitos.

- Toa” la culpa la tuvo “El Niño Fontanero”, “qu’estaba” allí, y, como “m’había” visto en lo de las Flores, me comprometió: “¡Ande, Tío Benito, que usted también las cuaja buenas!”. Yo no quería, pero se presentó el otro “Cosas”.

- Como no me lo explique, no sé de quién me habla.

- ¡Pues de Francisco, el otro hijo de Frasquito, que, como su mujer es prima de la mayordoma, estaba “invitao”. ¡Éste sí que tiene guasa! “¡Venga, Tío Benito, que yo le doy la entrada:’Tirititrán, tran, tran…’” ¡No había abierto la boca y ya estaba “La Lenny” bailando con los brazos “p’arriba”! Mi suerte fue que llegó mi amigo Antonio “Callao” y, como tiene esa voz viva, con media granaína me sacó del apuro.

- Veo que no se aburrió. Mucho quejarse, pero no se pierde una. ¿Cómo terminó la noche?

- Cantando y bailando el pasodoble “¡Qué viva España!”. ¡Qué ratico más bueno echamos! Empezamos con nuestras respectivas, pero, de vez en cuando, gritaba “El Cosas”: “¡Cambio de pareja!”. ¡Como “m’apañé”, “qu’acabé” “agarrao” al “Hein”, que, como no está “mu” “lucho” en pasodobles, me pegó dos pisotones en el juanete, que todavía los tengo “doloríos”!

- ¿Qué hizo su señora?

- ¡Bailar como un trompo con “El Niño Fontanero” que, como domina “mu” bien este baile, le dio unas “revolainas”, que por poco la “emnunca”! “M’acerqué”, pensando “qu’estaba” “asustá”, y me replicó: “¡Benito, qu’estamos de romería y hay que divertirse! ¡Triste, qu’eres un triste!”.

- Han tenido que pasar muchas romerías para contarme algo bueno de su señora.

- Pues la que tampoco se quedó atrás fue “La Lenny”. ¡Mira, la pilló “El Cosas”, se le lió la risa floja a la holandesa y, porque la llevaba bien “agarrá”, sino acaba en el suelo! “¡Anda, nene; pa que lo cuente luego en su país!” – remataba el bailarín.

- ¡Por fin acaban una noche como Dios manda y no como el rosario de la aurora!

- Porque yo no quise; porque, cuando llegamos a la casa, como mi mujer volvía “sembrá”, me soltó con “muncha” guasa: “Benito, esta noche no hay ‘Tirititrán…’”. Como donde las dan las toman, le contesté: “¡Ay, Virgen mía d’Alarilla, qu’hartico me tiene esta mujer! ¡Ay, que to le gusta! ¡Qué bien s’ha lucío esta noche! ¡Ay, cuando s’entere su hija!...”.
 

SÁBADO POR LA MAÑANA EN ALHARILLA

- Al día siguiente, después de lo que me ha relatado, se quedaría en casa descansando.

- ¡Bien “trempano” estaba poniendo el hato limpio “pa” irme a “l’Arilla” a dar mi vueltecica de rigor! ¡”Enfíjate” cómo estaría mi señora, “qu’hasta” me recomendó: “Benito, que no te s’olvide el sombrero de paja, qu’hace muncho sol y, como te se caliente el perol que tienes…”.

- O sea, que comenzó el día como acabó la víspera.

- Más o menos.

- De todas formas, aceptaría el consejo.

- ¡Ya lo creo! ¡”Menúo” calor hacía en El Llano!

- ¿Cómo le fue el recorrido?

- Cuando llegué, como estaba la iglesia abierta, lo primero “qu’hice” fue visitar a Nuestra Patrona y ver, con la luz del día, lo bien que le sentaba la corona nueva al traje verde.

- Entonces, ¿no lució el blanco de la Coronación?

- Ése está “guardao” “pa” otras ocasiones. Mientras rezaba a la Virgen, “me se” vinieron a la cabeza los raticos tan buenos que su Divino Hijo pasó durante los traslados con “Gitana”, “Gorda” y “Cordobesa”, con el perro de San Roque en Arjonilla, con los niños de Escañuela y Arjona o en el castillo de Lopera. ¡Lo que se divirtió acompañando a su Bendita Madre!

- Rezó y volvió a casa.

- ¡Qué va! Después fui “ase” María la de Eligio, “qu’había” “estao” malezuela y quería saludarla. ¡Ay, que tenía “qu’haber” ido el último día de novena!

- ¿Qué le sucedió para afligirse de esta manera?

- Na”, que la mujer agradeció tanto la visita que, cuando me despedí, dijo a su Pili: “Coge una bolsa y le metes una docena de güevos pa que El Tío Benito se los coma a nuestra salud”. Por un “lao”, no quería el regalo; pero, por otro, como esas gallinas están “criás” en “l’Arilla” a base de trigo, pensaba lo buenos “qu’estarían” fritos con un choricejo y un buen “peazo” morcilla. Así que, dándoles las gracias y diciéndoles que me daba “muncho” apuro, cogí la bolsa y me despedí.

- La noche anterior, las tortillas; en esta ocasión, los huevos. Nada, parece como si hubiera echado la promesa de pasar toda la romería con bolsas en las manos. ¡Vaya detalle que tuvo María con usted! Se queja, pero no me negará las atenciones que tiene la gente con usted.

- También te lo he dicho “munchas” veces: no puedo tener quejas de “naide”; porque, aunque “munchas” veces me pongo pesaejo, como me conocen y saben que no hay maldad, me tratan “mu” bien. ¡Ay, que no tenía “qu’haber” “cogío” los “güevos”!

- De todas maneras, volvería rápidamente al pueblo para dejar el regalo en casa.

- ¡A las tres quedó en recogerme mi yerno!

- ¿Qué hizo con el presente hasta esa hora?

- ¡Pasar “munchas” fatigas! Como hacía tantísimo calor, decidí sentarme debajo del árbol “qu’hay” en el patio de la cofradía. “¡Con estas temperaturas, capaces son de salir los pollicos!” – pensaba a la sombra.

- Allí espero a que viniera su yerno.

- ¡Qué va! Si “na” más sentarme, “dende” el balcón del salón de los mayordomos me jipó Manolín “Veleta”: “¡Tío Benito, suba y échenos una mano, que s’ha amontonao trabajo!”. Como tengo esta sangre que Dios “m’ha” dao”, después de explicar a Manolín y a Luis Ángel, que también estaba alli, lo de los “güevos” y ponerlos con “cudiaico” “pa” que no se rompiera ni uno, me lié a meter cervezas y refresco. Creía que con eso cumpliría, pero “m’endiñó” “El Pacurro” una fregona:” ¡Entre los dos ya mismo dejamos esto como los chorros del oro!”. ¡Y “pa” las “fregonás” que tiene el salón!

- No imagino a Luis Ángel fregando.

- ¡Fregando, lavando los caballos, echando los cohetes, partiendo jamón, haciendo flamenquines…! ¡En mi vida había visto yo a un mayordomo tan “atareao”!

- Con tanto trabajo, sudaría y tomaría algo para refrescarse.

- Un par de cervecejas cayeron. “El Veleta”, que, como sabes es capataz en la Semana Santa, “ca” vez “qu’íbamos” a dar un trinque a la botella, gritaba “mu” fuerte: “¡Tos por igual, mis valientes: al cielo con ella!”. No te lo creerás, pero no me las tome tranquilo pensando que, con los guasones que son, eran capaces de dejarme sin “güevos”.

- Desconfiado sí es un rato.

- ¡Lo mismo que me pasó con mis amigos de la Caseta “La Sonaja”, “qu’estuvieron a punto de resfriarme!

- En otras ocasiones me ha hablado de este colectivo romero.

- Son un montón: “El Nene”, “Los Churros” “Mánuel” y Juan, “Los Cabilas”, Antonio “Capote”, Jesús “Joselito”, Francisco Antonio Gallego, su primo Francisco Luis, Manolo Consuegra, etc. etc.

- ¿Qué le hicieron para casi enfermarlo?

- Na” que, “pa” combatir el calor, habían “instalao” en el techo unos tubicos “qu’echaban” agua. ¡”Cucha” tú, que después de lo “qu’había” “sudao”, vino “mu” bien ese fresquito! Pensé: “¡Éstos son capaces de secar El Quiebrajano con tal de no pasar fatigas!”.

- Conociendo el percal, seguro que se interesaron por el contenido de la bolsa.

- ¡Y si no “m’ando” listo, se gasta allí mismo! “El Nene”, como es tan buen cocinero, al enterarse saltó: “¡Tráigalos, Tío Benito, que voy a preparar unos gúevos alharilleros!”.

- No conocía esa receta.

- Y yo tampoco. Agradeciéndoles el refrescón, como los llevaba intactos, me despedí “inspirao”: “Pa otra ocasión dejamos/ los güevos alharilleros/ porque quiero llegar a casa/ con los doce güevos enteros”.

- Con tal de no soltar prenda, hasta se volvió poeta.
 

SÁBADO TARDE Y PASEO DE CABALLOS

- No sirvió “pa” “na” la poesía, porque estaba claro que no llegaba a mi casa con el regalo de María.

- Conociéndolo, me extraña mucho que conservara todavía su preciado tesoro.

- Pues ya tenía los minutos “contaos”.

- ¿Se le cayó la bolsa y se rompieron todos?

- Como mi yerno me dejó en el Camino Alto, pasé por “El Epi”, la taberna del “recordao” Pepito “Gamboas”. Mira por donde, estaban allí mis amigos “El Hein” y “La Lenny” con Salvador Gallo, su “cuñao” Tasio, Agustín Moreno, Paco Benítez, “Parritas”, “Jose” Milla, Gonzalo “El Botas”, “El Sánchez” y Manolo, el marío “d’Almudena”, la “qu’estuvo” de directora en CAJASUR. ¡Poco fresquitos “qu’estaban” a las tres de la tarde en la puerta con el aire “acondicionao” “qu’había” “preparao” el tabernero!

- Seguro que tenía un ventilador potente.

- ¡Ni eso! Lo que hizo fue colgar un buen fardo de “l’acituna” en “toa” la calle. Así que, en vez de cuarenta grados al sol, había cuarenta y dos a la sombra. Con tanto saludo y tanto abrazo ¡”qu’apuros” con los dichosos “güevos”!

- A esa hora, se despediría y se marcharía a casa.

- ¡Qué va! Salvador, en cuantico “s’enteró” de lo que llevaba en la bolsa, como es tan dispostón: “Tío Benito, como aquí no pué ser, porque no hay cocina, ¿qué le paece si nos vamos a ’La Casa del Pueblo’ y le pedimos al amigo Pedro que nos haga unos güevos al lebrillo?”. No me quedó más remedio que tirar “p’alante” porque se presentaron las mujeres, de los que “t’he””nombrao”, y, al enterarse, empezaron a gritar: “¡Torero! ¡Torero! ¡Torero!”. También los holandeses achucharon “to” lo que pudieron: “¡Toguego! ¡Toguego! ¡Toguego!”.

- ¡Por fin aporta algo a la colectividad, porque siempre las “convidás” han corrido por cuenta de los demás.

- Al pronto, me quedé “mu” serio, pero luego “m’alegré”. Tuvimos suerte porque, a esa hora, estaba “to” “ocupao”; pero fue llegar y se quedó libre una mesa “mu” larga. Después de saludar a Pedro y colocarnos, Salvador me cogió la bolsa y le dijo lo que queríamos. “Normalmente, lo que se consume en el local, es de la casa; pero, en este caso, tratándose de El Tío Benito y sus amigos, haremos una excepción. ¡Pónganse cómodos, que ya mismo están mojando sopas!”. ¡Qué “güevos” nos prepararon con sus ajitos, su jamón “picaico” y su abundante aceite “d’oliva” virgen extra! Mientras esperábamos, “La Lenny” preguntó por mi señora y, al contestarle “qu’estaba” en mi casa, dijo Tasio: “¡Ya mismo la traigo con la Vespa!”. ¡Yo no sé dónde apañó la moto, el caso es que, en un abrir y cerrar de ojos, se presentó con mi parienta “agarrá” a él con un casco que “pacía” La Hormiga Atómica!

- Me alegro por su señora, porque también tiene derecho a divertirse.

- A ver si te crees que la tengo “atá” a la pata la cama y le prohibo que salgo. Lo que pasa es que, casi siempre, tiene algún achaque con las hijas y los nietos.

- ¿Cómo la recibieron?

- La primera que se le tiró, “pa” darle un par de besos, fue la holandesa: “¡Ya ega hoga de que viegas a comeg güevos in librilio!”. Mi mujer “s’hizo” una canastita con tanto saludo y tanto beso.

- Usted estaría más tranquilo teniendo a su señora al lado.

- Como pude, “l’expliqué” por qué estábamos allí y el reate de los “güevos”. “¡”Mu” bien hecho, Benito! Cuando vea a María, aparte de darle las gracias, le diré donde los gastamos.” – me replicó “mu” contenta con “La Lenny” “agarrá” a su brazo. Al verla pensé: “¡Como ésta le tome el gusto, no se va a Holanda hasta que pase el Día de Jesús!”.

- Supongo que darían buena cuenta de la suculenta comida.

- ¡La que se le lió al lebrillo! Dijo el tabernero: “En respeto a la edad, lo pondré cerca de El Tío Benito”.

- ¡Vaya detalle que se tiró el amigo Pedro!

- No me sirvió de “na”; porque, como tengo el bracillo corto, casi no llegaba a mojar la sopa. Lo que sí pillé fue un montón de manchas de “El Hein” que, como no estaba “mu””lucho” en lo de las sopas, tuvimos que darle un curso “acelerao” de cómo mojar en unos “güevos” al lebrillo. ¡No veas los chorreones que “m’endiñó” en “ca” viaje! ¡No es malo que mi mujer estaba delante; de lo contrario, la que “m’habría” “liao” al ver los lamparones!

- Con el personal que tenía a su alrededor, no me los imagino comiendo, bebiendo y callando.

- Pili Orozco, como tiene tan buena sombra, mientras echaba una sopa de media carica de panete, decía con “munchas” eses: “¡Essssto lo aprendí en el colegio de pago, donde me internó papá, para que aprendiera buenosss modalesss!”. “Parritas, su “marío”, no hacía “na” más que mover la cabeza “d’un” “lao” “pa” otro: “¡Ay, hasta qu’estemos tomando la última copa en ‘El Pastel’!”.

- ¿No apareció el cante en ningún momento?

- Empezó Tasio, el mejor de los Gallos, cantando un fandango de Vilches, “qu’es” su pueblo.

- Conozco a Salvador, Antonio, Ramón y Rafa, pero no sabía que Pili Barneto tuviera otro hijo.

- ¡Que no es su hijo! Lo que pasa es que, como Tasio, el “marío” de Tere, es tan buena gente y tan gracioso, dicen “qu’es” el mejor de “tos”. Lo mismo que también dicen “qu’el” mejor de los Cobos es mi primo Paquito Ruiz.

- Veo que no se aburrieron en “La Casa del Pueblo”.

- ¡Hasta nuestros dulcecitos de postre nos puso el tabernero! ¡Qué bien nos trataron Pedro, su mujer, su madre y su suegra! Eso sí, cuando salimos “pacíamos” los de la “cofradía de la mancha” con los lamparones en la pechera.

- Después, como estarían cansados, se irían a casa para reponer fuerzas.

- ¡Cómo nos íbamos a ir, si no estábamos “cansaos”! Como es costumbre, nos fuimos a la puerta del “Pastelerito” “pa” ver los caballos. Cuando pasábamos por la puerta de “La Peña”, “m’encontré” con D. Manuel “Rojitas”, uno de los hombres con más arte de “to” Porcuna.

- En eso estoy completamente de acuerdo con usted.

- Nos vemos de higos a brevas y, aunque él ha “sío” maestro y yo soy casi “anarfabeto”, como nos criamos en Jesús, siempre que nos vemos, nos damos un abrazo. Como no podía ser “d’otra” manera, “m’alegró” con sus cosillas: “Si enfermo crees que estás/ no vayas a la farmacia/ toma gambas y jamón/ y manzanilla de La Gitana/ y verás qué colores apañas.” “Pa” despedirnos, me recitó otra: “A Dios le hablo de tú/ al demonio de usted y de don/ porque con la mala gente/ poquita conversación”. Como “me se” quedaron “mu” bien las letras, se las dije a mi mujer. “¡Míralo, aparte de cantaor, también va a salir poeta d’esta romería!” – me contestó mientras se comía una tortica “d’almendra” con “La Lenny”.

- Siendo los mayordomos Luis Ángel y Maribel, imagino que el ambiente sería excepcional.

- Cuando nos situamos, ya había un montón de caballos y carruajes dando vueltas en La Carrera.

- Supongo que los mayordomos, en esta ocasión, no pasearían en uno de sus coches de caballos.

- ¡Cómo lo sabes! ¡Qué garrampones se presentaron a lomo de sus caballos “arropaos” por familiares y amigos! ¡Qué aplausos y qué vivas se llevaron cuando llegaron a La Farola! A las ocho de la tarde no cogía un alfiler ni en las aceras, ni en la “calzá”. ¡`Cállate, que me llamó “l’atención” un grupo de jóvenes retratándose con un palico que tenía una maquinica en la punta.

- Un palo selfie incorporado al móvil, Tío Benito. Se ha puesto de moda y todo el mundo se hace fotos de esa manera.

- ¡Dímelo a mí, “qu’al” poquillo se presentó Emilio Avellaneda el del Barbero, y nos dijo que nos pusiéramos “p’hacernos” un retrato “d’esos”!

- Todo le extraña, pero enseguida se apunta a las nuevas tecnologías.

- ¡Pues casi saco pesca del “selfi”! Emilio nos dijo que nos juntáramos y echáramos la cabeza “p’atrás”, y, como yo tenía el pescuezo todavía “dolorío” de los del baloncesto, por poquito “me se” sube otra vez la mulica y me quedo como “Miracielos”. A la que no hizo “muncha” gracia el retrato fue a mi señora, porque la pilló comiéndose un socialista y ¡no veas que bigoteras de chocolate sacó!

- Va siendo hora de que me cuente cómo estuvo el ambiente en Alharilla para la Salve y los cohetes.

- Dende” “qu’ejercemos” “d’agüelos”, aunque nos quedamos con ganas, no vamos: primero la obligación que la devoción. De “toas” maneras, no faltó la diversión porque, como nos llevamos a los nietos “soliviantaos” del jaleo, ¡la que liaron hasta que se acostaron y se durmieron! “Pa” colmo, mi mujer “s’había” “hartao” “d’almendras” y “alvellanas” del “Pastelerito” y estuvo “toa” la noche bebiendo agua. “Benito, haz el favor de traerme otro vaso d’agua, qu’éste ya me lo he bebío”. Me callé por no liarla, pero estuve a punto de decirle: “¿Por qué no llamas a tu amiga ‘La Lenny’ pa que te lo traiga?”. Apagué la luz, me dormí y soñé que llegaba a mi casa con la docena de “güevos” que me regaló María la de Eligio.
 

DOMINGO POR LA MAÑANA: COFRADÍA Y CAMINO

- Dirá lo que quiera, pero ejercer de abuelo tiene la ventaja de que se levantaría como una rosa para encarar el día más importante de la romería.

- ¡Cómo lo sabes! A mi mujer se lo dije: “Guarda la pelliza, qu’este año tampoco la voy a nesecitar”.

- En una fotografía, de las que cuelga el amigo Manolo Jalón en su página web, lo con fundí con “El Paillo”.

- Mi mujer me lo comentó: “Benito, es menester que no te pongas to lo que te regalan, porque vas que paeces un muestrario”. Y tenía “toa” la razón porque estuve media hora poniéndome la “mellada”, el estadal rojo y el de la Coronación, los cascabeles, la chapa del “Luti”, la otra que me regaló Conchi Recuerda, el catavinos de la Peña Romera “De 2 a 3”, la ramica de romero, la gorra con un montón de “pin”, …

- Con esa carga y con el calor que hizo, pasaría sus fatiguillas.

- ¡Sí, pero con “muncho” gusto! ¡”M’iba” a quedar yo en La Carrera a la sombra sin acompañar a mis amigos Maribel y Luis Ángel! ¡Qué guapetona la mayordoma, y qué garrampones su “marío” y su hijo Ángel! ¡Qué arte los tres a caballo!

- Siendo los Hermanos Mayores del mundo ecuestre, llevarían un buen acompañamiento.

- ¡Sí señor, que “puén” estar orgullosos! Además, lo que te dije al principio: “na” más que con que hubieran ido “Los Perreras” y “Los Pacurros” el lleno estaba “asegurao”. Se presentaron a caballo, en carrozas, en carruajes, a pie …Sólo faltó tener un pariente aviador para haber “echao” claveles a la Virgen “dende” la avioneta. ¡Qué poderío de cofradía! Los años andarán cortos “d’agua”, pero no se nota; porque hay gente en Porcuna con “muncho” “estógamo” y, cuando dice a tirar “p’alante”, no falta un detalle ni en ropas, ni en “calzao”, ni en “na”.

- Supongo que se dispararía el número de caballos en la cofradía.

- Hubo “munchos”; pero, como a la gente “l’ha” “dao” por los enganches, se presentaron menos de los que “s’esperaba”. ¡Qué chochico iba Emiliano Vallejos con su mujer en su buen coche de caballos! Lo mismo que Francisco Rincón con “toa” su familia en otro más grande. Mi “cuñao” “m’aclaró”: “Benito, m’han dicho que a Rincón lo llevan atao al asiento pa que, cuando pase por la puerta del Ayuntamiento, no tenga el volunto de bajarse pa ver si hay algún recao pa él. Y otra cosa, el carruaje lo ha pagao su hijo Francisco Javier con lo qu’ha cobrao del pregón”.

- ¿Cómo estuvo La Carrera?

- Como las plazas de toros: la acera de la sombra, “abarrotá”; la del sol, vacía. ¡Lo que caía ya a esa hora! La suerte fue que Mariano la Rosa y su gente habían hecho una carroza con un abanico “mu” grande de flores de colores y, como es tan manitas, “l’había” puesto un mecanismo “pa” que se moviera y refrescara el ambiente. Los”qu’iban” a caballo, en carruajes o en vehículos no iban mal; pero, los “qu’íbamos” andando, entre “l’arena” “qu’habían” “echao” en La Carrera, que “t’atascabas” hasta la espinilla, y el calorín, ¡qué fatigas pasamos! María Estrella, la hija del “Macareno”, con su traje de gitana, ¡iba “pa” darle algo con el estandarte de “Los Caminantes”! A pesar de “to”, ¡no le dio aire ni “na”! Otros que sudaron bien la camiseta fueron los de las bandas, sobre “to” la de cornetas y tambores que desfiló con traje de gala. “La ocasión lo requiere” – nos explicó nuestro amigo Daniel “El Morenico” “cargao” de botellas con agua “pa” los músicos. Ves tú, el que no notó el calor fue mi amigo José María Moreno, el que trabajaba en Olior.

- Seguro que, como le ha quedado una buena pensión, acompañaría en un vehículo con su buen aire acondicionado.

- ¡Tú no lo conoces! Llevaba de reata a su nieto “subío” en un cochecico “tirao” por un pony. “¡Tío Benito, que de chiquitos se crían los arbolicos!”, me saludó “empapaico” de sudor, pero más ancho que largo. Otro “agüelo”, “qu’iba” mojando “l’arena” con la babica que se le caía, era “Jose Lagarto” con su nieto conduciendo un tractor de juguete. ¡Cómo se notan los hormigos cabezones! “¡Mete la supercorta!” – aconsejó al tractorista cuando se quedó “atascao” en “l’arena”. A otro que tengo que nombrarte es a Benito “Cachumbo”.

- ¡Claro, como es su tocayo!

- ¡Qué no, hombre! Tú sabes que Benito estuvo haciendo carrozas durante “munchas” romerías, pero lo dejó.

- Tío Benito, sólo los que las hacen, saben el trabajo que supone acompañar de esta manera tan colorista y artística. No todo el mundo está dispuesto a sacrificarse para lucir un rato.

- Bueno, pues “Cachumbo” ha vuelto por sus fueros y, “pa” sus amigos Luis Ángel y Maribel, apañó una carroza con la Virgen de “l’Arilla” y San Benito, La Cruz Blanca y los dos silos. Sólo le faltó poner las más de quinientas cigüeñas, “qu’estuvieron” en Porcuna y pasaron la noche en los “tejaos”. Al “malditalma” de mi tocayo no se “l’ha” “olvidao”, porque ¡qué bonita le salió!

- Me está hablando de mucha gente, pero todavía no me ha nombrado a Juanjo “Pitones”, el ayudante del mayordomo cuando salía con sus enganches.

- ¡Ése otro que “pacía” que lo habían “escayolao”! ¡Qué serio iba conduciendo el coche de caballos con su familia! ¡No es malo que su mujer, “qu’es” bastante más guapa “qu’el”, nos saludó cuando nos vio! Mi “cuñao”, que no pierde detalle, “m’aclaró”: “Benito, Juanjo tiene tanto poderío dende que pone lo de la Fería de Ganao con su amigo Pedro ‘El Barandón’. No ves que trabajan con muncho margen. ¡No dejan na los bacadillos de chorizo y morcilla!”.

- En resumidas cuentas: otra cofradía sobresaliente.

- Pues los que sacamos también “mu” buena nota, fuimos Los Caminantes.

- ¡Cómo se nota que es parte interesada!

- Lo tengo que decir alto y claro: este año, como en los mejores tiempos, llevamos una buena representación; y eso que la temperatura no era la más “apropiá” “p’andar”.

- Me alegro por este colectivo romero porque, según me decía en otras ocasiones, la cosa iba a menos.

- Este año ha “sío” “to” lo contrario. Como habían “arreglao” lo de La Cruz Blanca, habían puesto la cabeza del guerrero y “s’había” “corrío” la voz de que nos iban a retratar, nos juntamos un montón. Además, como también habían “acondicionao” “La Trocha” nos fuimos a “l’Arilla” por allí. El trayecto es corto, pero ¡qué bonitos los lindones “to” verdes y con sus margaritas, campanillas, amapolas…!

- La Trocha” ha quedado muy bien, pero hay una cuestecita que…

- ¡Tienes “toa” la razón! ¡No “l’echaron” “güevos” las caminantas “pa” subirla con los “vestíos” de gitana! ¡Y no te digo “na” de Julia, la mujer de mi amigo Manolo “El Zocato”, que llevaba la mascarilla “pa” lo de la flor del olivo! Como el Señor es “mu” grande, premió el esfuerzo “qu’habíamos” hecho.

- Ahora va a resultar que hizo un milagro.

- Puedes pensar lo que quieras; pero, si al llegar al Sendero “d’Alarilla” “t’encuentras” con Manolín “Veleta” y Manolín “El Mozo” repartiendo, en nombre de los mayordomos, cervezas, refrescos, bocadillos de jamón, calamares fritos, lomo … ¿cómo lo llamarías? ¡Qué detalle se tiraron Luis Ángel y Maribel!

- Más que milagro, yo lo achacaría a la suerte que tiene: ¡por todos lados va pillando!

- ¡Con un par de cervezas y un buen bocadillo de jamón me puse “pa” dar la vuelta por “La Huerta Comendaor”, que también “l’han” “dejao” nueva! Lo que no me gustó fue ver el montón de latas y botellas vacías, “qu’había” en las cuneta hasta “l’Arilla”. Si están hartos de decirnos que no tiremos “na” y usemos las papeleras y los “conteneores”, no “m’explico” por qué no hacemos caso.
 

EN ALHARILLA

- Con la carga extra, llegarían más tarde que nunca a Alharilla.

- A las doce y cuarto estábamos en “El Humillaero”.

- Me contaron que entró una cofradía importante.

- No “t’engañaron”; porque, a pesar de los “poblemas” que se plantean a caballistas, enganches y carrozas, en esta ocasión fueron “munchos” los “qu’aguantaron” hasta el final. ¡Lo que disfrutaron los mayordomos saludándolos en la puerta de la iglesia!

- ¿Cómo encontró El Llano?

- A pesar del calorín “qu’hacía”, había un ambiente “exagerao”; eso sí, “to” el mundo a la sombra. ¡”Enfíjate” cómo estaría la cosa, “qu’estaba” “El Paíllo” vendiendo cupones con un sombrero mejicano, “d’ésos” que son “mu” grandes, y tenía a cuatro romeros “metíos” debajo! Nosotros, hasta la hora de la misa, nos refrescamos un poco a la sombra del árbol “qu’hay” en el patio de la cofradía. ¿A que no sabes quiénes estaban allí?

- Con tanta gente, ni idea.

- ¡”El Hein” y “La Lenny”! En cuanto nos vieron ¡”qu’abrazos” y qué besuqueos nos pegaron! Como son tan blanquitos, pensé: “¡Con el día qu’hace, éstos acaban coloraos como los tomates!”. Mi mujer, “qu’en” cuantico los vio, “s’hizo” una canastita, se lanzó: “Benito, vamos a lo de las melladas, que quiero tener un detalle pa que s’acuerden de nosotros”.

- A usted no se le habría ocurrido.

- ¡El que quiera recuerdos, que se los pague! ¡Con lo bien “qu’iba” el día, me tuve que rascar el bolsillo! ¡Veinte “l’euros” costó el detalle! Yo los habría “apañao” con un estadal; pero, mira por donde, estaba vendiendo Inma Peláez, que “pacía” “qu’había” hecho un curso en El Corte Inglés, y “l’endiñó” un lote “d’estadales”, “melladas”, pulseras, abanicos… ¡Vamos que, cuando se lo pusieron, llevaban más cosas “colgás” que yo!

- Tío Benito, cuando se va de romería, hay que aceptar las cosas con alegría, porque un día es un día.

- Pero es que no fue sólo eso. Al salir, nos encontramos a mi hija la mayor, que llevaba a mis nietos: “Mama, que se queden con vosotros, porque me s’ha descosío el volante del vestío y voy a darle una puntará. Ya mismo los recojo”.

- Son los gajes que tiene ser abuelo. Lo que no se haga por los hijos y por los nietos, no se hace por nadie. ¡Bien orgulloso se sentiría presentándoselos a sus amigos holandeses!

- Además, como mis nietos también son rubios, no “s’hartaron” de decirles cosas en su lengua. “Mu” guapos, “mu” graciosos, pero ¡a ver si tuvieron una atención con los chiquillos! Empezó el mayor: “¡Agüelo, agüelo, quiero una peonza! ¡Agüelo, quiero una peonza!”. Como no entendíamos lo que nos pedía, nos llevó a un puesto, “qu’había” en medio del Llano, y señaló lo que quería.

- ¡No me diga que no sabía lo que era una peonza!

- Vamos a ver, “toa” la vida del mundo eso ha “sío” un trompo. ¡”Menúos” canitos pegaba con la púa cuando jugaba en El Paseo de Jesús con mis amigos “Los Chavalicos”, “Los del Rubico Municipal”…!

- Como buen abuelo compraría el juguete al nieto.

- ¡Qué remedio! ¡Otros diez “l’euros” que me costó el dichoso trompo! ¡Lo mismo que cuando por una peseta te daban dos, con su zumbel y “to”! Además, ahora son “mu” raros: de plástico, con luces… ¡Vamos, que “l’han” puesto “munchas” tonterías “pa” valer lo que valen!

- Sus amigos, ¿no se adelantaron y pagaron?

- Ésos con reír tenían bastante. ¡Ea, ni el globo “d’un” caballico, que quería el más chico!

- El globo se lo regalarían con la peonza.

- ¡Otros cinco “l’euros”! “Agüelo, que va relleno d’un aire especial pa romerías” – “m’hizo” el artículo el feriante.

- Con este imprevisto, llegarían tarde a misa.

- ¡Y qué misa la “d’este” año!

- Con tanto “Perrera” y tanto “Pacurro” la iglesia se quedaría pequeña y no cogerían buen sitio.

- Lo del sitio fue lo de menos, lo peor fue que mi hija no recogió a los niños y tuvimos que oírla con ellos. Bueno, eso “d’oírla” es un decir; porque, cuando uno no echaba el trompo, al otro “l’hacía” gracia y soltaba el globo. José Daniel Heredia, “qu’estaba” cantando con el Coro de la Hermandad, bajó un poquillo “enfadao”: “¡Tío Benito, haga el favor de atar el globico a la muñeca de su nieto, porque es la cuarta vez que se lo bajo!”. Y es que, como estaba relleno “d’ese” aire especial, ¡no he visto más rápido que “s’iba” “p’al” techo! ¡Qué misa con los nietos, el ruido de las otras cofradías llegando y el calorín! A la Virgen se lo dije, después de felicitarla por su santo: “¡Virgen mía, perdona que hoy no t’haga muncho caso, pero ya ves qu’estoy de servicio!”. Su Divino Hijo, como también es niño, “m’entendió” y “l’adiviné” una risica de complicidad. ¡Vamos, que si “m’hubiera” “insinuao” lo más mínimo, habría ido corriendo a comprarle otra peonza y otro globo!

- Quiero recordar que instalaron buenos ventiladores en la iglesia para mitigar las altas temperaturas.

- Si, pero, a pesar de estar funcionando a pleno rendimiento, ¡qué chorros de sudar se les cayeron a D. Jesús y a D. Luis mientras decían la misa, y eso que llevaban ropa “d’entretiempo”! El que se libró fue el monaguillo nuestro amigo Benito, “qu’ese” día no ayudó como acostumbra. ¡Ves tú, los “qu’estaban” fresquitos eran los anderos!

- No me creo que, este sufrido colectivo romero, estuviera de rositas con lo que estaba cayendo.

- Hombre, en comparación a lo que les esperaba a las cinco de la tarde, eso era un chispeo. El que tuvo también buen estreno fue el Cristo “qu’había” “regalao” “l’Agrupación” de Cofradías y está “colgao” en la iglesia conforme entras a mano derecha. ¡Porque el “acabao” es bueno, sino ese día pierde hasta la pintura!

- ¿Cómo se portó nuestro párroco?

- Después “d’un” año más con nosotros y lo de la Coronación, nos echó un sermón “mu” bonito acordándose de los momentos “vivíos”, de las personas mayores, de los enfermos y de los que no habían “podío” acudir. Lo mismo “qu’hizo” Librada, al acabar la misa, agradeciendo al pueblo de Porcuna y a las cofradías de Arjona, Arjonilla, Escañuela y Lopera lo “qu’habían” “aportao” en este año tan especial. “¡Agüelo, agüelo, qu’estás llorando!” – se percató mi nieto el mayor. Y es que “m’emocioné”; porque, con la edad que tengo, no volveré a repetir esa experiencia.

- ¿Qué hicieron después de la ceremonia religiosa?

- ¡Pasar otras fatiguillas!

- ¡Vaya romería amarga que se le presentó!

- Por lo visto, mi hija, en vez del volante, estaba cosiendo el “vestío” de gitana entero.

- Adivino que se les estropeó el plan y tuvieron que quedarse más rato con los nietos. De todas maneras, sus amigos holandeses les echarían una mano.

- Ésos, aunque no son “d’aquí”, “s’olieron” “qu’era” la hora de la cerveza y se perdieron. “Tío Benito, pegdone, pego tenemos qu’ig a haceg pi” – “m’avisó” “El Hein”. ¡Y yo que pensaba que los extranjeros no meaban! El caso es que mi mujer y yo nos quedamos con los dos nietos “qu’estaban” “mu” “entreteníos” con el trompo y el caballico en la lonja de la iglesia. “Benito, vámonos a la sombra, qu’aquí nos va a dar un torozón” – aconsejó mi parienta. ¡Ay, “qu’están” “mu” mal “criaos” hoy “tos” los niños! ¡Que no se les “pué” dar “tos” los gustos!

- ¡Otro lamento más!

- Con los distraídos “qu’estaban”, mira por donde, pasó un nene, que llevaba un pecera con su agua y su pez dentro. ¿A que no sabes lo que pasó cuando mis nietos lo vieron?

- Me lo imagino.

- ¡Hasta el más chico, “qu’apenas” habla, decía: “¡Pe! ¡Pe!”. ¡Más caro que si hubiera ido a Málaga!

- ¡No me diga que vendieron estos animales en Alharilla!

- Además, no les faltaba un detalle porque, como hacía tantísimo calor, “ca” pez venía con su gorra y su abanico. Mis nietos ya no querían ni trompo, ni caballico. Yo me resistí, pero empezaron a llorar y salió “l’agüela” protectora: “Benito, no seas así, que más cuesta una mortaja”. ¡Otros veintidós “l’euros” que me gasté!

- A once euros cada animal.

- Diez y diez, porque también hubo que comprar dos bolsicas de “comía”. Según dijo el “vendeor”, el pienso de conejo no valía. ¡Si llego a saber esto, mi hija pierde el volante, pero yo hubiera “tenío” cuarenta “l’euros” más en la cartera!

- Entre sus amigos holandeses y sus nietos se le fue la paga del mes.

- Y porque, cuando íbamos a tomarnos una cerveza en un chiringuito, nos vio Luis “El Moneo” y nos convidó “ase” Rafael “El Salao”, el “qu’está””casao” con la del “Moreno Jacinta”. Como Luis es tan camastrón, empezó: “Tío Benito, como voy pa concejal, estoy haciendo campaña y le voy a presentar mi pograma”. ¡Lo que me faltaba: que “m’hablaran” de política!

- Tengo entendido que los candidatos acordaron no comenzar la campaña hasta que pasara la romería.

- Y así lo hicieron. Lo del “Moneo” fue una broma que me gastó: “¡Jamón de bellota, lomo ibérico, queso añejo d’oveja, chuletitas de cordero, langostinos de Sanlúcar, manzanilla La Gitana…a cambio d’un voto!”. ¡La que me lió! El dueño de la casa vino a rescatarnos: “Tío Benito, no l’hagan caso. Lo que sí está claro es que pueden comer y beber lo que quieran”. ¡Qué bien nos trataron! ¡Hasta “l’echaron agua fresquita a los peces! Ésa es otra: si no “m’ando” listo y me pongo serio, se los comen. “¡Vamos a hacer un espeto como los de sardinas en Málaga!” – sugirió el aspirante a concejal.

- Tomaron rápidamente la copita y a esperar la salida de la Virgen.

- Como todavía era “trempano” y “s’estaba” “mu” fresquito al hilo puertas, estuvimos viendo el espectáculo flamenco que tenían “montao” en el patio. ¡No sabía que Curro Pérez es tan buen cantaor!

- ¿Quién es ese artista?

- El hijo de Pilar Morente, la viuda de D. Juan Pérez el “qu’era” médico. Al ver el arte que tenía cantando, “me se” vino a la memoria su tío Perico Morente cuando bailaba sevillanas con tres mujeres a la vez. En cuantico me vio, como me conoce, gritó: “¡Esta rumbita para El Tío Benito y señora! ¡Va por ustedes!”. El “malditalma” ¡qué bien quedó! Por cierto, ¡vaya piripi “qu’está” hecho el Presidente de Nuestro Padre Jesús, nuestro amigo José Miguel, bailando sevillanas!

- No debe extrañarse de estas cosas, porque cada uno llevamos un artista dentro.

- Pues éste lo tendría “mu” hondo; porque yo lo más que “l’había” visto era que, cuando va en la “procesión, lleva el báculo con “muncha” soltura. Bueno, pues “pa” las sevillanas, igual. ¡Qué arte moviendo los brazos y haciendo los careos! A mi mujer le faltó tiempo: “¡Qué graciosos son algunos hombres, y qué sosos otros que yo me conozco!” – apuntilló con su “rintintín”.

- Siempre lamentándose, pero recibiendo invitaciones por todos lados.

- Porque soy bueno y “m’aguanto” con “to”.

- ¿Qué paso con sus nietos?

- ¡”Na”, que, cuando estábamos en lo mejor, se presentó la madre “mu” “sofocá” a recogerlos: “¡Mama, no he venío antes porque m’encontré con los mayordomos y me convidaron a una copica en su salón. Supongo que no os habrán dao muncho la lata”. Cuando reparó y vio la peonza, el caballico y las peceras, nos regañó: “¡Ay, que me los vais a malcriar! ¡Qu’estáis deseandico de comprar cosas a los niños!”. ¡Lo que yo te digo: después del dineral, lo habíamos hecho mal!

- A partir de esos momentos, libres para disponer de sus cuerpos serranos.

- Yo quería quedarme en las escaleras de la casa porque bajaba un fresquito “mu” bueno y daba gusto, pero nos vieron los componentes del Dúo “Los Manolos”, nuestros amigos Orozco y “Villica”, y les faltó tiempo: “¡Como estamos celebrando el décimo aniversario de mi mayordomía, ya mismo se vienen a comerse con nosotros un potaje con espinacas como los de antes!”. ¡A ver quién era el guapo que se negaba! Cuando íbamos “pa” la casa del Orozco, pensaba: “No hay na como un potaje pa combatir el frío qu’hace”. Al llegar se presentó Miguel, el padre del dueño, con un buen plato y una cuchara: “¡Rapidico y que no quede un garbanzo, que ya mismo está la Virgen fuera!” – “m’amenazó”. Como si fuera un pavo, me lo comí. Entre el calor que traía y el potaje, pensé que me daba algo. “¡Tío Benito, ahora es cuando está bien pa la procesión: una poquita agua, y andando!” – sentenció el hermano de mi amigo Salvador Orozco.
 

PROCESIÓN

- O sea que, sin apenas reposar los garbanzos, fueron a ver salir a la Virgen.

- ¡Cómo íbamos a faltar al momento más importante de la romería después de lo que llevábamos “pasao”! Como iba un poquito “pesao”, cabilé: “Benito, en cuantico empieces a andar te se quita to. A ver si se mueve un poquito aire que s’haga más llevaera la proseción”.

- ¿Bajó la temperatura?

- ¡”To” lo contrario! Cuando a las cinco en punto asomó la Virgen por la puerta de su bendita casa, entre el calor, la gente, los cohetes y la campana tocando, tendríamos por lo menos cuarenta y cinco grados.

- La gente buscaría buenas sombras y se desluciría la salida de Nuestra Patrona.

- ¡Que te crees tú eso! ¡”Empapaicos” en sudor aguantamos mientras gritábamos “mu” fuerte: “¡Viva la Virgen de l’Arilla! ¡Viva la Patrona de Porcuna! ¡Viva Nuestra Madre! ¡Viva la Reina de la Campiña!...”. Como siempre me “s’hizo” el “nuo” en la garganta y no pude responder a D. Jesús y a Librada cuando me saludaron. “Benito, bebe una poquita agua que te se pase” – “m’ofreció mi mujer.

- Esa tarde los anderos sudarían lo suyo durante el recorrido.

- Na” más salir ya iban chorreando, pero felices por llevar sobre sus hombros a lo más grande que tenemos. Como los acompañé “to” el rato, te digo que no oí una queja de “naide; al contrario, “to” fueron vivas y palmas a Nuestra Patrona. Además, como estaban “mu” “entrenaos” de los traslados, la llevaron mejor que nunca. ¡Qué lagrimones se le cayeron a Juan Pedro “Batato” que, como estaba recién “operao” de la cadera, no pudo estar en su sitio como siempre. “¡El año que viene con nosotros!” – le gritaron sus compañeros al pasar a su “lao”. Cállate que al llegar a la altura de la “Casería del Sordo”, como allí hay “munchos” árboles y hacía una sombra “mu” buena, dijeron de quedarse allí hasta que refrescara. “¡El qu’esté arrecío que se salga!” – gritó José Daniel Heredia ejerciendo de andero mayor. En “munchas” ocasiones “t’he” puesto a los anderos por las nubes; pero, en esta ocasión, “to” lo que te diga “d’ellos” es poco: hay que tener “muncha” fe y devoción a la Santísima Virgen de “l’Arilla” “p’aguantar” lo “qu’aguantaron” esa tarde. “Pa” mi ha “sío” una de las “proseciones” más calurosas que recuerdo.

- Todos los comentarios coinciden con el suyo.

- También los “aguaores” hicieron su apaño refrescando a los sudorosos anderos. Tuvieron “muncho” mérito “tos” los que acompañaron: autoridades, mayordomos, cofradías, bandas de cornetas y tambores, “Perreras”, “Pacurros” y demás romeros. Por otro “lao”, también hubo “munchos” comodones que se quedaron a la sombrita porque decían “qu’hacía” “muncho” calor “pa” ir en la “procesión”. Lo que te digo “munchas” veces: pronto, como no pongan aire “acondicionao” en El Llano no va “naide” con la Virgen. ¡Ellos se lo perdieron!

- Por lo visto, debido a las altas temperaturas, los servicios médicos tuvieron trabajo extra.

- Yo no sé si los médicos estuvieron “mu” “atareaos”, pero lo que te puedo decir es que las ambulancias no dejaron de pasar con las sirenas sonando mientras la “procesión” subió y bajó al “Humillaero”. ¡Que juego de cintura la de los anderos “pa” esquivarlas! “¡La suerte es qu’estamos mu entrenaos, si no nos pillan en el primer regate!” – comentó nuestro amigo Manuel “El Picaor” “agarrao” a su varal y con el sudor goteándole por el bigote. ¡Qué fresquito al llegar al “Humillaero”!

- ¡No me diga que se nubló y bajó la temperatura!

- Es broma. Lo que pasó es que “Los Cañas” habían “montao” una caseta en medio de los olivos y, como son tantos, aquello “pacía un cañaveral, y tú sabes “qu’esos” sitios son “mu” frescos. ¡”Enfíjate” “s’hizo” frío que a mi amigo Luis “El Ratón”, “qu’era” el cohetero, se “l’apagó” el puro justo cuando Mari Carmen Gómez “l’iba” a hacer unas preguntillas “pa” Canal 45! “Toa” la “procesión” “l’aguantó con su camisa de felpa y su chaleco “acolchao”. ¡Lo que pudieron sudar también nuestra amiga Mari Carmen y el de la cámara!

- Entonces, con estas condiciones climatológicas, se resentiría la afluencia de romeros en “El Humilladero”.

- ¡”To” lo contrario! Allí, un año más, vivimos uno de los momentos más emocionantes de la “proseción”: los anderos queriendo llevar a la Virgen hasta La Cruz Blanca “pa” que viera lo bonita que “s’ha” “quedao”, los romeros aplaudiendo y vitoreando a Nuestra Patrona, las banderas ondeando, la banda de las Angustias tocando “¡Guapa, guapa y guapa!”, Cristian haciendo sus solos… ¡Vamos, que “naide” “s’acordó” de los grados que teníamos en esos momentos! Al que vi con una pena como una cebolla fue a mi amigo Antoñín Horcas. “M’acerqué” “pa” interesarme por él y me comentó: “Tío Benito, es qu’estoy de cumpleaños”. “Pues pa estar de fiesta lo disimulas mu bien. ¿Quién cumple los años?” – le pregunté. “¡Si no es de naide, es que hace treinta años que llevo sacando a la Virgen y, como soy tan llorón, lo estoy celebrando d’esta manera!” – apuntilló dando un buen sorbetón. “Míguel” “El Avión”, que va delante en el varal, decía: “¡Cudiao con el emperro qu’ha pillao! ¡ ¡M’ha mojao hasta los calzoncillos!”.

- Con tanto calor, se aliviaría el paso y la Virgen se recogería antes de la hora.

- ¡Qu’equivocao” estás! Se sudó “muncho”, pero “naide” dio un paso más largo que otro. En la “Casa de Pepe Cobo”, como si estuviéramos a la sombra, “s’echó” el tiempo que se tuvo “qu’echar”. ¡Qué bonito habría “estao” la Salve del “Orejita” y la de “La Señora” de Auxiliadora con prisas! ¡Qué “panzá” de llorar nos pegamos! ¡Anda que no tuvo vista D. Juanín Cobo poniendo las rejas “pa” desaguar en la puerta de su casa! Por si fuera poco, en la de Mari Cruz Barrionuevo, también se nos hizo un nudejo al escuchar a los del “Sentir Alharillero” dedicándole una canción “mu” bonita a la Virgen de “l’Arilla”. Como estaban allí “Los Malenos” Pepe y Manolo, pensé: “¡Qué t’apuestas que, como tienen tanto arte pa cantar, s’echan un mano a mano y nos tienen aquí hasta qu’anochezca!”.

- ¡No me diga que los hermanos Cervera también son cantaores!

- ¡Y de los buenos! ¡Otro mal rato nos quedaba que pasar!

- ¡Como no fuera “Casa de Eligio!

- Efectivamente. María había “estao” malezuela y, al verla con su Pili y su nieto echando claveles a su Divina Vecina, “m’emocioné” un poquillo al pedirle: “¡Virgen mía que la tengas buena!”. Como íbamos “d’emoción” en emoción, nos aliviamos escuchando a Jesús Serrano que, con su guitarra, cantó una copla “mu” bonita a la Virgen. Como se llevó un aplauso “mu” grande al acabar, mi mujer comentó: “Éste va a llegar más lejos que su hermano ‘Jóse’ en el Carnaval”. ¡Cómo cambió la cosa a partir “d’esos” momentos!

- ¿A qué se debió el cambio?

- Como en la puerta de la Cofradía “d’Arjona” hacía “muncho” fresquito a la sombra los anderos se dieron un alegrón bailando con la Virgen mientras la banda, “dirigía” por Juan Francisco Arenaga “El Pequeño Mozart”, un joven músico “d’Arjona”, tocaba y cantaba El Avemaría. Como se recrearon y no arrancaban, nuestro Alcalde, avisó: “¡Vamos rapidico que ya mismo empieza la campaña y hay que pegar carteles!”. Una que no tenía prisa, a pesar “d’estar” malamente de los pies, era mi hermana Angelita que, con su vecina Amparito Burgos, hizo “toa” la “proseción”. Haciendo honor a nuestra familia paterna ¡iba “colorá” como un pimiento morrón!

- ¿Es cierto que hubo desmayos en el interior de la iglesia al regreso de la Virgen?

- Eso mismo me dijeron. Como sabes, llevo años sin entrar porque, con tanta emoción, tantísima gente y el calor, el día menos “pensao”, Dios no lo quiera, “pué” ocurrir algo. Yo me conformo con despedirla en su puerta y, después de pedirle que nos tenga a “tos” buenos, gritar “mu” fuerte

¡Viva la Virgen de Alharilla!
¡Viva la Patrona de Porcuna!
¡Viva Nuestra Madre!

 

Casto

 

Publicado en el programa de festejos oficial de la Romería de Alharilla 2016, editado por la Cofradía de la Santísima Virgen de Alharilla.

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